Despertar

Quiero despertar de este sueño. 

No me gusta decir pesadilla. Los sueños buenos o malos sueños son. No os lo he dicho, pero he tenido un sueño. Era un sueño raro, imposible, algo que creo que no puede ocurrir más que en libros distópicos o en el cine de ciencia ficción. Una de esas historias que te mantienen pegado a la butaca sobresaltado, imaginando qué pasaría si fuera realidad o que hacen que pases con ansia las páginas del libro para ver cómo acaba la novela. Esos sueños te hacen pensar en tus seres queridos y te asustas más. 

Pasaba de todo. Os voy a ahorrar detalles. No los contaría bien y así, a la brava, os pueden hasta resultar grotescos o fuera de lugar, incluso de mal gusto. ¿Cómo puede la mente en el estado de inconsciencia del sueño crear esa fantasía imposible? A la vez parecía no tener final. Y cada vez iba a más, como los buenos relatos y los buenos guiones de terror. Quizá ese es el género ahora que lo pienso. Terror. Menos mal que es un sueño. En el sueño los puntos de giro como en el guion de una peli o la intriga en una novela estaban muy bien trazados provocando incluso ansiedad o necesidad de parar y continuar más tarde. Incluso sentía que sudaba en el sueño y que tosía del estrés del mismo y me faltaba el aire. A la vez, era un sueño consciente y me decía a mi mismo en el sueño: «Tranquilo, es solo un sueño». 

Pero, como todos los sueños tienen un final, este también lo tuvo. Yo creo que no volveré a ser el mismo después de este sueño. Aunque todo parecía haber vuelto a su lugar y como muchos sueños se van olvidando con el tiempo.